Ser una persona muy bajita tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, lo mismo ocurre si eres muy alta; sobre todo si eres una mujer y, como Natt mides un metro noventa. Así es, la joven streamer y tiktoker ha contado a través de esta última red social algunas de las situaciones más surrealistas que ha vivido por ser tan alta.
Natt ha compartido un vídeo en su perfil de TikTok, el cual acumula más de 300.000 reproducciones, en el que cual enumera y cuenta algunas de las "anécdotas de medir 1,90". El vídeo, no ha tardado en viralizarse y son muchas las personas que han dejado en él comentarios como: "Mido 1,96. Lo que mas me sorprende es la confianza que coge la gente porque sí, sin conocerte", "la anécdota de la señora es muy 'tierra trágame'" o "gracias, mido 1,78, me has ayudado a recuperar mi autoestima".
La joven ha empezado a contar sus anécdotas con una situación surrealista que vivió en un supermercado: "Comprando, como una persona normal, porque soy una persona normal, pues la cosa es que se me acercó una señora muy mayor, unos ochenta y pico, noventa años", cuando la señora la vio, se le quedó mirando, le azotó el culo y le dijo: "Madre mía, madre mía, que chica más alta, que guapa". En ese momento, Natt no supo cómo reaccionar: "Me quería morir", asegura.
La segunda anécdota es más común, le suele pasar más a menudo cuando está en algún lugar público: "De repente, escuchar la voz de un niño que le dice a su padre: 'Ay, papá, pero ¿por qué es tan alta? Parece un gigante'". No obstante, eso no es todo, también ha contado que le suele "parar la gente por la calle, parar su coche al lado mío, pitar y decirme: '¿Tú cuánto mides?'".
Está claro que Natt ha vivido muchas situaciones surrealistas y sigue contando: "Yo cuando tenía 13 años medía 1,80 y tenía un sueño, que era ser modelo, entonces fuimos a una agencia de modelos. ¿Sabéis lo que me dijo esa agencia de modelos? Que era demasiado alta".
Ha contado también algo que le pasó cuando era más pequeña, tenía unos 10 años, "en ese momento hacía baloncesto, baloncesto nivel niña de 10 años". "Pues no va una madre y empieza a decir que yo no tengo 10 años, que tengo 15" y le pidió al árbitro ver el DNI de Natt en el que efectivamente pudo ver su fecha de nacimiento y que no había mentido con su edad.
Y, por último, la anécdota que más rabia le ha dado vivir: "Me pasó cuando tenía 3 años, estaba en el pediatra. Yo empecé a jugar con una niña, ¿qué pasa? Que la niña tenía 7 y medíamos lo mismo. La madre de la niña se pensó que yo tenía la edad de su hija, pues no coge la señora y va y le dice a mi madre: 'Tu hija es lentita, es retrasadita'. La señora le estaba preguntando a mi madre si yo tenía algún tipo de discapacidad mental".