Un instituto edita las fotos de su anuario para tapar el escote de las alumnas: "Están avergonzando a las niñas"
Todas las fotografías editadas son de chicas, el equipo masculino de natación aparece con el torso desnudo
Una de las afectadas es una alumna de 15 años que ha asegurado que con esto lo que están consiguiendo es que se sientan avergonzadas de su cuerpo
Tanto padres como alumnos se han quejado al instituto por lo ocurrido y se les devolverá el dinero del anuario
Lo de aparecer en las fotografías del anuario cuando acaba el curso escolar es algo muy estadounidense. Los estudiantes posan con sus mejores sonrisas porque saben que esas fotografías serán un recuerdo que guardarán de por vida y al que recurrirán cuando quieran recordar cómo fueron sus años en el instituto.
Pues bien, ha sido el anuario del instituto Bartram Trail de Florida, en Estados Unidos, el que se ha vuelto viral en los últimos días por los retoques que han hecho en las fotografías de algunas de sus alumnas.
El objetivo de estos retoques no es otro que tapar el escote de algunas de las estudiantes que aparecen en él. Se había difundido el rumor en el instituto de que esta era la intención de uno de los responsables de los anuarios y finalmente descubrieron que el rumor era cierto cuando este se entregó a los alumnos el pasado fin de semana.
Efectivamente no se habían equivocado y cuando recibieron el anuario los alumnos vieron que decenas de fotografías que aparecían en él habían sido manipuladas con Photoshop para tapar los escotes de las alumnas, además de una manera nada discreta. Que las fotografías estaban editadas es una obviedad y esto ha cabreado a muchos de los estudiantes, ya que consideran este retoque innecesario.
Las quejas de los padres y alumnos
Una de las estudiantes afectadas por el retoque de las fotografías dio una entrevista a The New York Times en la que explica cuál fue su reacción al ver su foto en el anuario y cómo le hizo sentirse esto: "Deben reconocer que están haciendo que las niñas se sientan avergonzadas de sus cuerpos", dijo Riley O’Keefe, una de las afectadas que tiene tan solo 15 años.
La adolescente fue a comprobar si era cierto que habían editado las fotografías del anuario y descubrió que efectivamente en la suya habían puesto una barra negra en su escote para hacer que su camiseta tuviera un cuello más alto y que tapara más su pecho.
Además, al echar un vistazo al anuario descubrió que todos los retoques que se habían hecho eran a fotografías de chicas, las de los chicos no habían sido retocadas, ni siquiera las del equipo de natación, en las cuales los chicos aparecen posando con el torso completamente desnudo.
Tanto padres como alumnos piden que se explique lo ocurrido y una disculpa a las alumnas. Lo que han recibido ha sido la explicación de la portavoz del distrito, Christina Langston, que asegura que esto fue "una solución para que todos los alumnos fueran incluidos en el anuario"; ya que lo que se había hecho en años anteriores era directamente eliminar las fotografías "de los estudiantes que consideraran que violaban el código de vestimenta, por lo que las alteraciones digitales fueron una solución para asegurarse de que todos los alumnos fueran incluidos en el anuario".
También se ha pronunciado, según The New York Times, Tim Forson, el responsable de educación del distrito, que reconoce que "no se revisaron suficientemente los pasos que se dieron antes de que se tomara la decisión de editar algunas fotografías de los estudiantes. Es decepcionante tener que abordar esta situación". Además, según Forson, "nunca ha habido la intención de avergonzar a un alumno por la ropa que usa. Desafortunadamente, estamos aprendiendo una valiosa lección sobre la importancia del proceso y entendemos que la intención no siempre es el resultado".
La solución del instituto
El instituto ha respondido a las quejas de los alumnos y padres y ha asegurado que devolverá el dinero a todo aquellos que hayan comprado el anuario y no lo quieran porque se hayan visto afectados por los retoques con Photoshop.
Además, han asegurado que, a pesar de que son muy claros con el código de vestimenta en la web del instituto, tendrán en cuenta las quejas recibidas para que no vuelva a ocurrir lo mismo el próximo año.
Un chico fue expulsado de un instituto en España por llevar falda
En nuestro país también hay colegios e institutos que son muy estrictos con cómo hay que ir vestido a clase. La historia de Mikel Gómez dio la vuelta al mundo y es que a este adolescente le mandaron al psicólogo para preguntarle abiertamente por qué vestía así, a lo que este joven bilbaíno respondió tal como lo ha hecho en sus redes sociales: "Me apetecía y ya está".
Con la naturalidad con la que había llegado al instituto en falda, también explicó su historia en TikTok y a partir de ahí se formó la gran revolución. El resultado de todo esto fue que alumnos de toda España siguieron su ejemplo para apoyarle acudiendo al colegio en falda con el objetivo de concienciar de que esta prenda no es solo para chicas, que no es más que una tela y que no tiene género:
