La historia de este chico parece de película, pero no lo es. Él se llama Manel De Aguas, es de Barcelona y tiene 24 años. Desde 2019, ha dejado de ser un ser humano para convertirse en 'transespecie', para lo cual se ha implantado dos aletas de pez en el cráneo gracias a las cuales puede sentir los fenómenos atmosféricos como los cambios de presión, la humedad o la temperatura.
Manel de Aguas se considera a sí mismo como un 'artista ciborg', ya que su identidad no coincide con el concepto biológico de la especie humana desde que se implantó aletas de silicona en la cabeza. Fue él mismo quien diseñó estos dispositivos, que están conectados a su cráneo a través de unos circuitos sensoriales. Estas aletas necesitan de energía para funcionar y las carga con energía solar; además, pueden conectarse a redes WiFi.
Manuel llevaba ya mucho tiempo trabajando en este dispositivo, es más, antes de los implantes, construyó y utilizó el primer prototipo de un dispositivo mediante el cual era capaz de sentir las vibraciones atmosféricas. El diseño también era similar al de unas aletas, pero en este caso colgaban de una diadema colocada en la parte trasera de su cabeza.
El joven barcelonés intentó operarse en España, pero le fue imposible. Preguntó en varios centros de nuestro país, pero todos ellos rechazaron su propuesta, nadie estaba dispuesto a implantarle las aletas en el cráneo; así que tuvo que viajar hasta Tokio para que le operasen allí.
"¡La nueva etapa de mi metamorfosis ha comenzado oficialmente! Hoy finalmente instalé mis Weather Fins de diseño propio en mi cabeza. Ahora percibo la humedad, la temperatura y la presión atmosférica a través del sonido dentro de mi cabeza. Este sonido cambia en función de las condiciones atmosféricas que me rodean y se me transmite a través de las piezas que implanté en mi cabeza la semana pasada", compartió Manel con sus seguidores a través de una publicación de Instagram.
"Las Weather Fins son la tercera versión de mi órgano meteorológico y me permiten percibir más elementos meteorológicos que las versiones anteriores. Percibir más elementos meteorológicos facilita la predicción del tiempo y el desarrollo de esta capacidad es uno de los objetivos de este proyecto", añade. Estas palabras acompañan a una fotografía y un vídeo sacados en Tokio durante la intervención.
Manel De Aguas no es el único 'transespecie' en España. Es más, existe toda una autodenominada sociedad 'transespecie', una asociación fundada en el 2017 y compuesta por personas que, al igual que Manel, viven con dispositivos cibernéticos integrados en alguna parte del cuerpo.
Con este movimiento, además de crear comunidad y ayudarse mutuamente en todo lo que necesiten con respecto a su metamorfosis, pretenden también combatir el antropocentrismo y abrir paso para que otras especies puedan ocupar un lugar más alto en la jerarquía social.
Además, también juntos pretenden acabar con la intolerancia que viven los seres 'transespecie' por el simple hecho de existir y mostrarse tal cual son. Y es que, para Manel, ser "transpecies significa sentir que tu identidad ha trascendido la identidad de especie que te fue dada cuando naciste. Siento que rompí con la idea de que puedo simplemente ser o sentirme humano, y entiendo que la identidad humana también puede ser cuestionada y transformada. Entiendo que una parte de mí mismo está fuera del espectro humano, incluso cuando mis aletas están desinstaladas, y por eso me identifico como transpecie".