Trabajar mientras estudias: ¿cuáles son los mejores curros para sobrevivir? ¿Cómo puedes seguir formándote?
Matías CandeiraMadrid
Sobrevivir y estudiar, todo fatalUnsplash
¿Lo más codiciado para ganar algo de dinero mientras te formas? Becas de colaboración con la Universidad y prácticas remuneradas
¿Lo que necesitas para subsistir? Trabajos con contratos por horas.
Supongamos que no vienes de una saga familiar de terratenientes podridos de dinero y estás en esta disyuntiva tan agradable: tienes que comer, pagar facturas y, además, apoquinar lo que cuesta la matrícula de la universidad sin donar tus óvulos, matar por encargo o trabajar de elfo en un supermercado en la época navideña.
¿De verdad hay alguna manera de trabajar, ahorrar, estudiar y sobrevivir? ¿Cuáles son los mejores trabajos salvavidas en época de estudiantes?
Becas, prácticas remuneradas y colaboraciones con la universidad
Entre las opciones que combinan estudiar y seguir formándote, las más interesantes son dos: unas prácticas formativas mientras acabas el Grado o becas de colaboración con algún departamento de tu universidad o centro de estudios.
Becas de colaboración. Una opción más que interesante que ofrece el Ministerio de educación para esos estudiantes de últimos cursos de carrera que quieran seguir vinculados a la Universidad, colaborar en alguno de sus departamentos y encima (¡encima!) cobrar por ello. Uno de los puntos a favor es que estas becas colaborativas no interfieren con los horarios de clase de los estudiantes. Unas tres horas diarias. Casi todas las universidades las tienen, pero claro, son los juegos del hambre.
Prácticas formativas. Búscalas, porque las hay, y tu universidad tendrá algún sistema que permita a sus estudiantes acceder por convenio curricular a estos periodos de formación que hacen músculo en el currículum. Acude como una mosca hambrienta, si es preciso, a esas webs que ponen en contacto a los estudiantes buscadores de prácticas (como los buscadores de un oro cada vez más esquivo y escondido) y las empresas, entidades, instituciones y universidades que las ofrecen: Talentoteca, Mi Beca, BeWanted, Student Job y Primer Empleo.
Dependiendo de tu disponibilidad, tus clases, tus exámenes podrás orientar la búsqueda hacia un tipo de trabajo u otro.
Muchos optan por trabajos a jornada parcial, y otros tantos por trabajos puntuales de fin de semana para empresas que solo necesitan cubrir puestos por horas (bares, hoteles, discotecas y restaurantes). Los trabajos a jornada completa ya no son tan fáciles de conseguir (en una tienda de ropa, por ejemplo). Tu objetivo es que te contraten esas quince o veinte horas que van a dejarte tiempo para estudiar y descansar y, de paso, saldar cuentas y sobrevivir. En ciertas cadenas de ropa hay contratos más cortos, de ocho o nueve horas, para descargar los camiones con el género. Un único inconveniente: el curro se hace de madrugada.
Rellenar encuestas. Toluna y Opinolandia son abrevaderos interesantes para empezar a ganar dinero por esta vía. Si eres un robot programado para arrancar la carne de tus enemigos, seguro que consigues rellenar muchas al día sin perder el resuello. Si eres un ser humano, quizás acabes agotado, pero al menos habrás empezado a pagar tu primera cocacola.
Uber. Más vale que tengas carné de conducir y un rictus agradable (aunque estés muriéndote por dentro), para que los clientes te valoren con cinco estrellas. En verano suele ser la época que se necesita reforzar la plantilla de chóferes.
Clases particulares: un negocio que lleva boyante desde los romanos, cuando los esclavos daban clase a los hijos rubios con cara de porcelana de los patricios (nos lo acabamos de inventar, pero queda muy bien). A poco que controles de Matemáticas, Biología, Lengua o Literatura puedes instruir sobre la vida a esos pequeños demonios de familias con posibilidad de pagar una clase particular. El mundo no va a ir a mejor, les dirás, solo recibirán sueldos de mileurista y contracturas. Si eres un hacha y se te rifan, puedes plantearte mantener una tarifa para las clases que te permita subsistir mientras sacas el grado o el máster. Que la web Tusclasesparticulares sea tu templo.
Reponedor_ en un supermercado: siempre que te den guantes y no te toque comprimir, ordenar y sudar para que quepan todos esos trozos de merluza congelados en la cámara, todo irá bien. El sueldo medio ronda los 935 euros.
Redacción web. Si estás dotad_ para la redacción de cualquier tipo de tema que requiera una documentación mínima y conoces los entresijos del SEO y el posicionamiento, este puede ser tu vellocino de oro siendo estudiante para sacarte unas perras. Todos los días serán una aventura para tu pluma: ‘Los mejores remedios para la caspa radiactiva’. ‘Cómo esconder un cadáver en una fiesta’. ‘Quiero saber física cuántica en cinco minutos: ¿cómo lo consigo?’. Hay muchos portales en los que puedes bichear para encontrar ofertas de redacción web, en algunos casos con tarifas que rozan el cielo y otras el trabajo esclavo: Trabajofreelance, CopyBlogger Jobs, Hipertextual, Freelance Writing Jobs.
Repartidor_ de Glovo, de Amazon o de Uber Eats. Solo necesitas ser mayor de edad y tener ciertas tragaderas para hacerle la cama al capitalismo, porque, como explican varias webs, para trabajar en este tipo de empresas de reparto rápido el glover necesita ‘no dormirse en los laureles’. Ser rápido, ser veloz, ser.. (falta que digan: ser un velocirraptor). Tú eliges: jornada parcial o jornada completa, o esa siniestra ‘flexibilidad horaria’ que la empresa valora en sus empleados más fieles, esos a los que les sale joroba y trabajan en festivos y en sus propios funerales (nos lo han contado). En globo, un trabajador a jornada parcial puede facturar alrededor de 500 euros mensuales.
Creación de contenido. Lucharás a cara de perro con esos otros millones de youtubers, streamers y gamers que cada día llenan el vasto internet con grititos mamíferos. Ahora bien: si tu contenido es bueno y tu conocimiento de alguna materia despunta, puedes entrar por la puerta grande en ese verbo espantoso típico de jerga empresarial: monetizar tu contenido, sea porque eres expert_ en cerámica japonesa, escritura a mano o técnicas de productividad para el día a día.