Experto en beatbox y políticamente incorrecto: Grison, el colaborador de Broncano

La Resistencia es uno de esos programas que cuenta con algunas señas de identidad muy particulares que lo han hecho triunfar entre su audiencia. La primera de ellas, las entrevistas realizadas por David Broncano, a medio camino entre la incomodidad del “cotilla”, los gags y las interacciones con el público. Ya se sabe que al público suele gusta el mismo plato, uno que pueda reconocer por sus pequeños detalles y que tenga su eco rápido en redes sociales con alguna revelación picante y furiosa de quienes visitan el programa. Al fin y al cabo, todos tenemos un puntito aspiracional en nuestro podrido corazón, y por eso nos encanta el momento en que Broncano pregunta: “¿Cuánto dinero tienes en la cuenta corriente?”. No hay invitado al programa al que no le caiga ese momento salsero y cotilla.

En realidad, La Resistencia tiene mucho de stand up y de late show, cómicos reunidos que pelotean réplicas irónicas para subir la temperatura de la audiencia. El programa no sería nada sin dos de sus colaboradores estrellas; esas dos sombras que acompañan a Broncano a un lado del escenario. Ricardo Castella y Marcos Martínez, ‘Grison’, como le apoda cariñosamente el público y el propio David Broncano.

¿Quién es el colaborador estrella de Broncano?

La historia de Grison (Marcos Martínez) tiene algo de carambola luminosa. Poco a poco, el colaborador de Broncano se ha ido ganando a pulso el cariño del público en las diferentes temporadas, llegando a veces a eclipsar a Ricardo con sus opiniones, a menudo réplicas ingeniosas sin pelos en la lengua que levantan la admiración, la risa o la sorpresa de la platea. Habla sin tapujos sobre drogas y sexo, o juega a los dobles sentidos para darle la batalla ingeniosa a Broncano. El público le adora.

"Lo que digo no es para guionizarlo... me pasa que si lo pienso o intento ser gracioso no me sale. Yo no vengo de la comedia, vengo de tocar la guitarra y del beatbox, de la cultura de taberna y ahí hay mucha broma, así que improviso y me está saliendo medio bien, pero de ahí a ser principal en el programa... hay mucha gente como yo", contó en 'La lengua moderna', el espacio dirigido por Quequé.

Lo interesante es que ‘Grison’ entró en el programa por casualidad cuando Ricardo Castella, también músico, se cruzó con él en una tienda, donde trabajaba como comercial de la marca de instrumentos musicales Roland. Estar en el lugar adecuado en el momento justo nunca fue tan cierto como el momento en que el director del programa le propuso a Martínez unirse como colaborador y probar suerte en el formato, que entonces solo empezaba y no había cosechado los buenos datos de audiencia de la actualidad. Por suerte, Grison, según cuentan, ambicionaba desarrollarse en otros terrenos y no dudó en abandonar su trabajo para unirse al programa como guitarrista.

"Iba por las tiendas de música vendiendo ese aparato y me vino a ver un par de veces Ricardo. Me empezó a interesar la movida y, de repente, sacaron lo de La Resistencia y debió pensar en mí, de puta chiripa", explicó. "Me presenté en las oficinas [de Movistar] con una guitarra, en plan hippie. Yo pensé que este programa iba a durar semanas".

¿Tenía talento? Sin duda le ayudó su dilatada experiencia en otros musicales y programas en los que había trabajado como guitarrista: versionando a Estopa en musical Mayúmana: Rumba!, o como parte del la banda en el espectáculo The Vocal People, que le llevó a recorrer varios países.

Grison es además un maestro del beatbox, una disciplina vocal que consiste en imitar melodías, sonidos y bases con la única ayuda de la boca. 

El beatboxer y colaborador de La Resistencia ha pegado un gran cambio físico en este tiempo. Lo hemos visto pasar de la típica melena larga de heavy al pelo rapado, y también algún que otro retoque estético con ácido hialurónico, que reconocía haberse hecho con un poco de vergüenza. "Me he puesto un poco de ácido hialurónico, pero como me lo he hecho hace poco se irá bajando y asentándose […] Si me muero no me tiréis al contenedor amarillo, por favor. Puedo fingir que me ha dado un ictus, así fijo que me contratan en Telecinco ya". Fue una de sus bromas, celebrada en redes por algunos seguidorxs del programa y muy criticada por otros.