Nuestra caca va a cambiar el mundo (y Bill Gates ya ha metido pasta)

yasss.es
08/11/201812:51 h.Bill Gates ha dejado un poco de lado el terreno de la informática para desarrollar su carrera como filántropo, es decir, para dedicar su dinero, su tiempo y sus investigaciones a mejorar la humanidad y bueno, ha desarrollado un retrete que podría ser lo más.

Como si se tratase de un nuevo Piero Manzoni, el artista que vendió como una obra conceptual un bote en el que había defecado y lo llamó 'Mierda de artista', Bill Gates se presentó en Pekín con un tarro de heces en la mano para hablar de algo que nos incumbe a todos: la caca.
Pero no una caca cualquiera, una caca que unos segundos después de abandonar tu cuerpo se escapa por el retrete y va a dar en la mar, que es el morir. No, no. Una supercaca. Una caca que que, gracias al nuevo retrete del futuro que ha desarrollado la Fundación de Belinda y Bill Gates que no necesita estar conectado a un sistema de alcantarillado, será convertida en fertilizante.

Tarro de caca en mano, Bill Gates expuso uno de los problemas de salubridad más importantes a nivel global: la falta de inodoros y los problemas sanitarios derivados de ello en los países en vías de desarrollo. La falta de instalaciones sanitarias está matando a medio millón de niños anualmente, según expuso Bill Gates. En un solo tarro de caca (el que llevaba en la mano) podría encontrarse hasta 200 billones de células de rotavirus, 20.000 millones de bacterias Shigella y 100.000 huevos de lombrices parasitarias, que provocan un gran número de enfermedades.
Con su nuevo modelo de inodoro, que solo ha costado 200 milllones de dólares de nada, Bill Gates pretende renovar las instalaciones en escuelas y baños comunitarios, evitando así enfermedades como diarrea y fiebres tifoideas, y reutilizando nuestros desechos como fertilizante gracias a los compuestos químicos de este retrete, que, al no estar conectado al sistema de alcantarillado, no necesita agua corriente para funcionar, solo una serie de productos químicos que transforman la caca en material reaprovechable.

"Tengo que confesar que hace 10 años no hubiera pensado que sabría tanto sobre la caca", decía Bill Gates en su presentación. Es que tendemos a pensar que la caca es una mierda, pero nada que ver.
Cada vez son más los estudios que demuestran que un análisis de heces puede ayudar a resolver problemas no solo intestinales, sino también otros como la obesidad o las enfermedades mentales. No somos lo que comemos, somos lo que cagamos. Por este motivo, también, en los últimos años, se ha empezado a usar el tratamiento del trasplante de heces para salvar las vidas de pacientes infectados por Clostridium difficile.
Nuestras cacas pueden hacer del mundo un lugar mejor, y, fíjate tú por dónde, hacer del mundo un lugar mejor también mejorará nuestras cacas.