Cada persona necesita sus tiempos: cómo saber que has superado de verdad un desamor

Superar una ruptura no es algo fácil: consejos para llevarlo lo mejor posible
Señales que te ayudarán a ver si estás superando una ruptura o aún tienes que trabajártelo
Superar una ruptura es un proceso complicado y depende mucho de cada persona, por eso no debemos generalizar. Hay factores que influyen mucho, como por ejemplo lo duradera que fue la relación, si la ruptura fue amistosa o no, si mantienes contacto o no con tu expareja, lo feliz que fuiste durante el noviazgo, etc. Aun así, hay personas que han estado años con alguien y que lo superan en semanas, y otras que tardan meses en superar un amor express de verano. Sea cual sea tu caso, existen algunas señales que pueden indicar que las piezas de tu corazón roto vuelven a estar unidas.
Por qué algunas personas tardan en superarlo
MÁS
En el amor no hay reglas ni pautas infalibles, y en el desamor tampoco. Cada persona reacciona y vive la experiencia de una ruptura de forma distinta dependiendo de sus circunstancias.
Hay muchos factores que van a influir en la forma en la que gestionamos el desamor:
- Lo satisfactoria que fue la relación. Si la relación fue en general positiva, es más complicado olvidarla. Aun así hay excepciones, ya que no es raro encontrarnos con personas que rompen y vuelven una y otra vez con su pareja cuando es evidente que la relación es dañina.
- La causa de la ruptura. Es más fácil superar una ruptura cuando hay infidelidades, traiciones o un motivo grave y negativo. En cambio, si la razón es más difusa como por ejemplo ya no sentir amor, la ruptura puede complicarse.
- Mantener contacto o no con tu ex. Para superar una ruptura es mejor evitar el contacto con tu ex, al menos durante los primeros meses. Es importante normalizar poco a poco la situación, pero no puedes pretender ser amigo íntimo de una persona con la que compartías una relación amorosa nada más cortar.
- Nuestra autoestima actual. Una autoestima sólida y fuerte nos ayudará a gestionar mejor el proceso del desamor.
- El apoyo social que tenemos. Durante la ruptura es importante apoyarnos en nuestra familia y amigos. Lo importante no es la cantidad de personas a nuestro alrededor, sino la calidad. Rodéate de gente que te quiera, que te escuche y que te ayude en los momentos malos, aunque eso signifique decirte cosas que a priori no te gustan.
- Lo amplia que es nuestra vida más allá de la relación. Si tienes un trabajo, hobbies, amigos y muchos planes que cumplir, te será más sencillo distraerte e implicarte en otras tareas más productivas que pensar constantemente en tu ex.
Analiza cuál es el factor predominante en tu caso y poténcialo. Si estás en paro y tienes mucho tiempo libre para pensar en tu ex, pero tu autoestima fuerte y tienes una familia que te quiere, sácale partido al apoyo social. Si tu autoestima está por los suelos pero tienes un trabajo que te llena y muchos planes, distráete y poco a poco mejora tu amor propio. Lo importante es analizar nuestras fortalezas y debilidades y actuar en consecuencia.
Señales de que has pasado página
Mucha gente siente pavor cuando conoce a otra persona tras una ruptura. ¿Habré pasado página? ¿Y si no estoy preparado para algo nuevo? ¿Estaré engañándome a mi mismo y a mi ligue? Todas estas preguntas reflejan el miedo a volver a sufrir por amor, algo muy normal si has vivido una ruptura recientemente.
A veces es difícil entender nuestros sentimientos, sobre todo si no estamos acostumbrados a escucharnos a nosotros mismos. Por eso hemos recopilado algunas señales de que has pasado página y superado tu ruptura.
- Antes estabas constantemente pendiente de tu ex, pero ahora te da igual. Se acabo lo de stalkearle.
- Si miras tu historial de llamadas o tus chats recientes de WhatsApp, no hay rastro de tu ex. Antes le llamabas cada vez que salías de fiesta y por la mañana te encontrabas con varios mensajes de borrachera que te daban vergüenza. Ahora cuando te pasas con el tequila la única persona a la que mandas audios es a tu mejor amigo.
- Ya no le guardas rencor. No le deseas ni bien ni mal, te es indiferente.
- A veces es inevitable recordar tu relación, pero ya no comparas a tus ligues con tu ex. Eso de “pues a mi ex le habría gustado esta película” ya es historia.
- Has dejado de idealizarle y de devaluarle. Durante la ruptura pasaste rachas en las que tu ex era la mejor persona del universo, y otras en las que era un asco de ser humano. Ahora se ha convertido en una persona más, con sus virtudes y defectos.
- Cuando te encuentras con tu ex te da bastante igual. A veces es todo un poco tenso, pero no te da un vuelco el corazón ni te pasas dos días dándole vueltas después de coincidir en una fiesta.
- Vuelves a pensar en ti y en tu salud. ¿Te acuerdas cuando te pasabas todo el día en la cama y te alimentabas a base de patatas fritas? Ahora estás más activo, comes mejor, piensas en tu salud mental y te mimas.
- Ya no preguntas a vuestros amigos en común por tu ex. Antes cada vez que les veías les hacías un interrogatorio, ahora te da bastante igual.
- Tu playlist favorita ya no es un recopilatorio de canciones tristes. Por suerte para tus compañeros de piso has dejado de escuchar una y otra vez 'When You’re Gone' de Avril Lavigne.
- Has dejado de insistir para que seáis amigos. Te has dado cuenta de que no se puede forzar una amistad y has aprendido que algunas personas no vienen para quedarse en tu vida.
Si te has sentido identificado con alguna de estas señales, enhorabuena, tu corazón está curado –o casi–. Si todavía sigues asimilando tu ruptura, date tiempo y busca apoyo en tus amigos y familia. No te metas prisa, cada persona es un mundo.