Que no te engañen por ser joven: 5 prácticas laborales (muy comunes) que son ilegales

Víctor tiene 25 años y explica a Yasss que en su primer contrato laboral se realizaron prácticas ilegales: “Me dijeron fue que el contrato era en prácticas en jornada completa, pero cobraría jornada parcial”
Analizamos las prácticas ilegales más comunes: el contrato de prácticas eterno, los sueldos basura y las horas extras sin cobrar
¿Qué hacer si en tu empresa hay prácticas ilegales? Te explicamos dónde denunciar y cómo hacerlo
Cuando Víctor terminó su máster, se topó con un mercado laboral tan agresivo como caótico. El joven de 25 años envió su currículum a tantas empresas que perdió la cuenta, y cuando por fin tuvo su primera entrevista, la emoción se transformó rápidamente en decepción. “Lo primero que me dijeron fue que el contrato era en prácticas en jornada completa, pero cobraría jornada parcial”, recuerda. “Luego dejaron caer que era un trabajo en el que se echaban horas, que había que tener mucha vocación, y que todos poníamos de nuestra parte”, lo que en realidad era un eufemismo para no decir que esas horas extras no iban a ser remuneradas. Aceptó el empleo, y cuando acabó el contrato de prácticas, le despidieron.
Su situación no es algo aislado. Miles de jóvenes lidian a diario con la precariedad y los contratos basura, y el 28,3% de los jóvenes viven bajo el umbral de la pobreza por las condiciones laborales imperantes hoy en día. Esto ha provocado que la riqueza media de la generación millennial se sitúe en 3.000 euros, frente a los 63.400 euros de la generación anterior, tal y como ha señalado el informe ‘Brecha entre jóvenes y mayores’ de El Observatorio Social de La Caixa. Según el informe, sólo el 44% de los primeros tienen una vivienda en propiedad, frente al 65% de la generación X. Incluso quienes (a pesar de las altas tasas de paro) consiguen trabajo, deberían dedicar el 92,9% de su salario neto a pagar los 904 euros mensuales que costaba de media alquilar una vivienda en 2020.
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Hacer frente a esta situación desesperada no es fácil, pero un punto de partida es estar informados. Conocer las prácticas laborales ilegales más comunes y cómo denunciarlas es el primer paso para crear un clima laboral equitativo en el que no haya cabida para la precariedad o la discriminación. En Yasss te hablamos de algunas de ellas:
1. El contrato en prácticas eterno
Si eres joven o acabas de terminar el grado, seguro que te han ofrecido algún trabajo de prácticas. El problema surge cuando pasan los años y el contrato se mantiene en idénticas condiciones, ya que la regulación estipula que una persona no puede estar más de 2 años contratada en prácticas para la misma titulación, aunque sea en diferentes empresas, tal y como señala el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Tras esos dos años, si la empresa no dice lo contrario, la relación contractual para a ser indefinida.

¿Qué significa esto? Que si, por ejemplo, tienes un grado en ingeniería informática y un máster en ciberseguridad, te pueden contratar 2 años con un contrato de prácticas por el grado, y 2 años más por el máster, siempre y cuanto no tuvieses el máster cuando te hicieron tu primer contrato de prácticas.
2. El sueldo en prácticas
Seguimos con los contratos de prácticas, y es que hay mucha tela que cortar. Lo primero que debes saber es que lo que ganas con un contrato de prácticas nunca puede ser inferior al salario mínimo interprofesional (SMI), que en 2021 es de 1.108,33 euros brutos, en 12 pagas, o 950 euros brutos en 14 pagas. Si tu contrato es parcial, el salario será proporcional al SMI.
Por otro lado, existe un convenio que regula el sueldo de los trabajadores en prácticas y que especifica que el salario no puede ser menor al 60% durante el primer año o al 75% durante el segundo año. En otras palabras, el primer año en prácticas puedes cobrar, como mínimo, el 60% de lo que cobraría alguien con un puesto equivalente sin estar en prácticas, y el 75% durante el segundo año.
3. Las horas extras… ¿Se cobran?
Da igual que la empresa esté empezando, da igual que esté atravesando un mal momento, da igual que te apasione tu trabajo… ¡Las horas extras deben estar remuneradas!
Según la regulación actual, el precio de las horas extra se calcula añadiendo un 75% al precio de la hora ordinaria. De forma más sencilla, multiplicando lo que cobras en una hora de trabajo normal por 1,75. Otra opción es compensar las horas extras con tiempos equivalentes de descanso.

Además, hay ciertos trabajadores que tienen prohibido realizar horas extras: menores de 18 años, personas en permiso de maternidad, personas con discapacidad y trabajadores nocturnos.
Finalmente conviene señalar que las horas extras son solo obligatorias en dos casos:
- Cuando se ha especificado en el contrato o en el convenio del sector profesional.
- Por motivos de fuerza mayor, por ejemplo, la reparación de siniestros o urgencias.
Para reclamar las horas extras, lo mejor que puedes hacer es guardar todos los correos electrónicos, cuadrantes y horarios que demuestren la jornada trabajada. Y recuerda que el plazo es de un año.
4. Las preguntas indebidas durante la entrevista
Antes de conseguir un trabajo nos tenemos que enfrentar a esa temida entrevista, pero, ¿qué nos pueden preguntar?
Según la legislación, durante el proceso previo a la contratación sólo pueden recopilar datos para determinar si estás cualificado para el empleo. Por ejemplo, tu formación, tu experiencia laboral o los rasgos de personalidad que se adaptan a los requisitos del puesto.
Esto significa que cualquier pregunta relativa a tu género, orientación sexual, raza, nacionalidad o religión es irrelevante. No pueden preguntarte si quieres tener hijos, si tienes pareja, cuánto pesas o si tienes alguna enfermedad, por ejemplo.
5. El derecho a baja
Finalmente debes saber que cualquier trabajador tiene derecho a baja por motivos médicos o por motivos de salud mental. El tiempo máximo de duración es de 1 año, con la posibilidad de prorrogarlo, y durante este periodo de tiempo cobrarás:
- Nada durante los tres primeros días.
- El 60% del convenio del día 4 al día 20.
- El 75% del convenio a partir del día 21.
Sin embargo, hay ciertas excepciones en las que es posible cobrar el 75% del convenio desde el día siguiente a la baja en el trabajo.
Otra cosa que debes saber es que no tienes por qué contar el motivo de la baja a nadie, ni a tu jefe, ni a tus compañeros. Sólo debe saberlo tú médico de familia o de la mutua, que es quién concederá la baja.
¿Qué hago si en mi trabajo se comete alguna ilegalidad?
Si mientras leías este artículo te has llevado las manos a la cabeza porque en tu trabajo se comete alguna ilegalidad, puedes asesorarte en un sindicato, a través de un abogado laboralista privado, o mediante asociaciones sin ánimo de lucro destinadas a proteger los derechos de los trabajadores.

A la hora de denunciar a tu empresa a la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, debes saber que:
- No puedes hacerlo de forma anónima, ya que la identificación del denunciante es necesaria para tramitar la denuncia.
- Puedes informar (que no denunciar) de una irregularidad de forma anónima a través del ‘buzón de lucha contra el fraude laboral’ en la web de la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
- Puedes denunciar a una empresa, aunque no seas trabajador de ésta ni afectado.
- La denuncia se puede tramitar de forma presencial, online o por correo postal.
- Algunas situaciones en las que se recomienda denunciar de forma urgente son el acoso laboral, no estar dado de alta en la Seguridad Social, o puestos de trabajo en los que se incumple lo establecido por el contrato.