Síntoma de ansiedad, estrés o buenas noticias: ¿Qué significa soñar que estás embarazada?

No hay término medio: soñar que estás embarazada puede ser una alegría o un auténtico jarro de agua fría. Sea cual sea tu caso, en Yasss te ayudamos a interpretarlo.
Aunque uses condón, tomes un anticonceptivo hormonal a diario o lleves puesto el DIU, la duda siempre está ahí. Se mantiene, como una mosca alrededor de tu cabeza, poco antes de que menstrúes: ¿Y si se rompió el preservativo? ¿Y si el blíster de pastillas estaba caducado? La cosa no mejora cuando, por fin, consigues dejar de darle vueltas y empiezas a dormir. En cuanto cierras los ojitos y te sumes en el sueño, vuelve el pavor: en una de tus pesadillas, apareces con un tripón bajo el ombligo.

MÁS
Soñar que estás embarazada cuando, en realidad, no lo estás, es bastante común. Nuestro inconsciente puede jugarnos malas pasadas, ya sea porque le damos tantas vueltas a esa posibilidad que acaba apareciéndonos en la vigilia o porque realmente tenemos ganas de tener un bebé en nuestros brazos. Si has soñado que estás embarazada y quieres saber en cuál de los dos equipos estás, sigue leyendo: en Yasss te lo mostramos.
¿Por qué sueño que estoy embarazada?
Si no vas a ser mamá, ¿por qué sueñas entonces con ello? Los motivos son tan variables como personales, y te toca a ti hacer memoria para tratar de entender qué te ha podido llevar a pensar eso. Evidentemente, si te apetece ser madre pronto o tienes muchas ganas de tener un bebé, esto puede ser un reflejo; este sueño es habitual entre aquellas personas que planean ser madres o buscan quedarse embarazadas desde hace un tiempo.
He soñado tantas veces que estoy embarazada que ya me dieron ganas😍
— luchi💫 (@clrr94) 21 de septiembre de 2020
Si no es tu caso, pero aún así sigue siendo un tema repetido en tus noches, quizás sea el símbolo de un gran cambio o responsabilidad que estás a punto de asumir… y deseas. Puede significar que ha llegado el momento de hacer algo diferente o de que algo que deseabas en el pasado, pero que no pudiste cumplir, ha vuelto a presentarse como una oportunidad para ti. Quizás tu inconsciente esté con ese embarazo diciéndote que es el momento perfecto para hacer ese cambio que buscas desde hace tiempo.
Ahora bien, si estás pasando un momento personal complicado o exigente (la juventud es el ejemplo perfecto, ese momento en el que estás a punto de ser considerada adulta), ese sueño puede significar tu preocupación por el cambio. Tal vez notes que te pesan ciertas responsabilidades nuevas, que estás viviendo un momento en el que la madurez no es una opción; en ese sentido, el embarazo puede ser la señal de ese cambio inesperado que te asusta.

Soñar con tu propio embarazo
No es lo mismo soñar con un embarazo ajeno que con el de una misma. En el segundo caso, tendremos que hablar de una cosa u otra dependiendo de las características del sueño y cómo nos sintamos respecto a la gestación. En el caso de que sueñes que estás embarazada y no lo quieres (vaya jarro de agua fría), plantéate que quizás la tripa sea la manifestación de un miedo que tengas en tu vida actual.

También puede tratarse de la forma que toma un aspecto de tu vida que tiendes a negar o te gustaría evitar, pero que debes afrontar y te provoca angustia o estrés: una ruptura, una mudanza, reencontrarte con alguien del pasado… En ese caso, lo mejor es pararse un momento y, si lo necesitas, pedir la ayuda de un psicólogo.
Por el contrario, si sientes que estás embarazada y notas al bebé (con el cúmulo de sensaciones y emociones que eso supone), puede ser una buena señal. El vientre está relacionado con emociones profundas: sentir que algo se mueve dentro de ti puede ser una señal de que las sensaciones están empezando a aflorar. Un parto también puede ser el símbolo de un nuevo proyecto, un nacimiento: si sale bien, tienes ilusión en los beneficios que te traerá. Si sale mal, quizás tengas miedo de lo que puede traerte, y tengas que encontrar una nueva forma de afrontarlo.

Si haber soñado que estás embarazada te preocupa, evita darle una connotación premonitoria (¡está ya un poco desfasado!), e intenta darte tiempo para pensar qué puede significar. Un rato contigo misma, planteándote cuáles son tus problemas o preocupaciones, puede darte la respuesta a ese sueño que tantos quebraderos de cabeza te está dando. Si no, siempre puedes acudir a un psicólogo para que te ayude a tratar tu caso en particular.