La vacuna contra la covid y el consumo de alcohol: ¿se puede o no se puede beber después de ponértela?

Los rumores sobre la vacuna rusa, Sputnik V, han hecho pensar a mucha gente que no se puede beber alcohol después de vacunarse. Hablamos con el Dr. Sebastián Martínez Fernández, presidente del Colegio de Médicos de Zamora, para salir de dudas
Existe una relación entre el consumo elevado de alcohol y la supresión de nuestro sistema inmunológico
Algunas personas se preguntan si el consumo de alcohol después de vacunarse ha reducido la efectividad de la vacuna o les ha dado más efectos secundarios
Si hemos aprendido una valiosa lección desde que la pandemia de coronavirus puso patas arriba nuestras vidas esa ha sido, sin duda, la de aprender a lidiar con la incertidumbre. Desde que nos encerraron en nuestras casas para evitar que los contagios que colapsasen la sanidad hemos tenido que hacer frente a montones de imprevistos con un solo criterio o en una misma dirección: los rápidos avances científicos que nos permitieran entender esta nueva situación y, poco a poco, superarla. Así, en menos de un año llegaron las vacunas y en tan solo unos meses la mayoría de los españoles ya han recibido la pauta completa.
Sin embargo, y debido a esa incertidumbre y a una sensación constante de sobrecarga de información que nos confunde más que nos ayuda, aún tenemos muchas dudas. La población no es experta en epidemiología, y aunque hay algunos medios de comunicación que hacen una gran labor de divulgación para dejar claros los pasos más importantes, los bulos, las fake news y las medidas que se contradicen nos tienen un poquito alocaos.
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Desde que comenzamos a vacunarnos hemos tenido numerosas dudas que, poco a poco, han ido resolviéndose. Los efectos secundarios, los plazos para la segunda dosis, los medicamentos que debemos o no debemos tomar y... el alcohol.

La vacuna del covid y el consumo de alcohol
Todo comenzó cuando llegó a España la información de que en Rusia se estaba obligando a no beber alcohol antes y después de recibir la vacuna creada en ese país, la Sputnik V. Aunque esta vacuna no había sido aprobada en España, las dudas sobre si el consumo de alcohol afectaba a la eficacia de la vacuna surgieron entre muchas personas.
El pasado mes de mayo, la Sociedad Española de Inmunología (SEI) aclaró que "el consumo de alcoholes destilados y drogas tiene efecto inmunosupresor, con unos mecanismos muy parecidos a los que se producen en situación de depresión o estrés". Ok, ¿pero esto qué quiere decir exactamente?
Hasta hace poco se indicaba que la ingesta moderada de vino o cerveza podría ser “inmunosaludable”. Debemos negarlo y distinguir que un placer durante una comida no se debe identificar como saludable: que no afecte negativamente al sistema inmunitario no es sinónimo de salud
— SEInmunología (@SEinmunologia) 19 de mayo de 2021
"Hasta hace poco se indicaba que la ingesta moderada de vino o cerveza podría ser “inmunosaludable”. Debemos negarlo y distinguir que un placer durante una comida no se debe identificar como saludable: que no afecte negativamente al sistema inmunitario no es sinónimo de salud", zanjaban. Es decir, que algo no sea perjudicial para nuestra saludo no lo convierte en saludable. O lo que es lo mismo, que beber un vino o una cerveza de vez en cuando no sea malo no lo convierte en bueno, ni mucho menos recomendable.
Los médicos aconsejamos lo de siempre, que no se debería tomar alcohol con la vacuna o cualquier medicamento, pero no hay evidencias científicas
"La información se actualiza continuamente, pero hasta la fecha no hay un estudio para ver la relación del alcohol con las vacunas que se están poniendo en España, por eso no hay información oficial. Lo que está claro es que el alcohol, si se bebe en exceso, sí afecta, en este caso al sistema inmunitario", explica el Dr. Sebastián Martínez Fernández, presidente del Colegio de Médicos de Zamora.
¿Cómo afecta el alcohol a nuestro sistema inmune?
Quizás, antes deberíamos detenernos un momentito para explicar cómo funciona una vacuna. La función de cualquier vacuna es ayudar al organismo a desarrollar inmunidad contra un virus. En el caso de la vacuna del coronavirus, las dosis nos suministran linfocitos T de "memoria" (glóbulos blancos que "atacan" al virus), además de linfocitos B (glóbulos blancos que actúan como defensa) que recordarán cómo combatir ese virus en el futuro.
Tal y como explican en la web oficial del SEI, "el sistema inmunitario es un sistema complejo de células y factores solubles que trabajan de forma coordinada para mantener la integridad de nuestro organismo, y que incluye el defendernos de patógenos, rechazo de trasplantes incompatibles, vigilancia anti-tumoral y responder frente a señales de peligro (bien endógenas como exógenas)".
Por lo tanto, cuidar nuestro sistema inmunitario es algo que nos va a beneficiar muchísimo, y sí, hay muchos factores que influyen en cómo de a tope trabaja este sistema para protegernos. Algunos no dependen de nosotros, como nuestra edad, nuestra genética o la previa exposición a esos patógenos. Pero otros, como nuestros hábitos de vida, sí. Por ejemplo, el estrés y la ansiedad son muy perjudiciales, ya que "se libera cortisol (hormona inmunosupresora). Puede durar mucho tiempo la inmunosupresión (meses) tras procesos de estrés agudo".
También es importante realizar ejercicio moderado con frecuencia, dormir 7-8 horas de sueño al día y evitar el tabaco, el alcohol y el consumo de drogas. Tal y como especificaban desde el SEI, el consumo de alcohol provoca el mismo efecto que el estrés, es decir, si se consume esta sustancia durante mucho tiempo (vamos, que tus hábitos sean tomarte unas cervecitas todos los días) puede haber inmunosupresión.

¿Quiere esto decir que si has dormido mal el día antes de vacunarte, no has hecho ejercicio en el último mes o te has tomado dos cervezas la vacuna no te va a hacer efecto? No. ¿Quiere esto decir que los hábitos saludables (que todos sabemos de sobra cuáles son) ayudan a que nuestro cuerpo funcione perfectamente y se lo ponen más fácil a nuestro sistema inmune? Sí. ¿Debemos entender que si te tomas una caña después de vacunarte vas a poner en riesgo a tu sistema inmune? No. ¿Quiere esto decir que debemos tomarnos una caña después de vacunarnos? Tampoco.
"Los médicos aconsejamos lo de siempre, que no se debería tomar alcohol con la vacuna o cualquier medicamento, pero no hay evidencias científicas", aclara Martínez Fernández. "Ya se han vacunado a muchas personas hasta la fecha y seguro que algunos de los vacunados beben alcohol habitualmente, pero no se ha estudiado nada en este aspecto".
Hasta la fecha no hay un estudio para ver la relación del alcohol con las vacunas que se están poniendo en España
En The New York Times aseguraron que no hay pruebas científicas de que tomar una o dos copas después de recibir una dosis de la vacuna contra el coronavirus disminuya el efecto de esta. Los expertos coinciden que el consumo de alcohol afecta al sistema inmune a largo plazo, es decir, cuando se consume habitualmente, no puntualmente. Resumiendo: a tu sistema inmune no le va a afectar lo que hayas hecho el día en el que te pusiste la vacuna, sino tus hábitos de vida generales. Y, por supuesto, ningún científico te va a recomendar que tomas alcohol antes o después de vacunarte, ya que el alcohol no es saludable en ningún caso.
El alcohol y los efectos secundarios
Lo que sí apuntó el médico oncólogo Elmer Huerta, experto de la Universidad George Washington, en declaraciones para la CNN es que beber alcohol después de recibir la vacuna del coronavirus puede intensificar los efectos secundarios de la misma.
Tal y como apuntó la OMS, es esperable experimentar efectos secundarios como dolor del brazo en el que se ha recibido la vacuna, fiebre, cansancio y escalofríos. Suelen durar unos pocos días y desaparecen solos. "El hecho de sufrir efectos secundarios leves o moderados después de ponernos una es señal de que la vacuna funciona y el sistema inmunitario está trabajando".