Tener un sueño íntimo con alguien es normal y su significado es más simple de lo que parece

Te levantas agitadísimo, con el pulso a mil por hora y el pelo pegado a la cara. Miras el móvil: las cuatro de la mañana. Vuelves a tumbarte, pero estás tan nervioso que no puedes dormir. Has tenido un sueño más pegadito de la cuenta con una persona que no deberías y que, hasta ese momento, quizás ni siquiera sentías atracción. Pero las cosas han cambiado, ya no puedes volver atrás. ¿Deberías decírselo o dejarlo pasar? ¿Qué significa eso, qué sientes realmente? ¿Eso ha estado ahí siempre o es que ayer cenaste muy fuerte?

Así que tecleas un ratillo y llegas hasta aquí. Antes de nada, vamos a tranquilizarnos: un sueño puede agitarnos, recolocarnos y dejarnos hechos una bolita en nuestra cama hasta la mañana siguiente, pero no es una premonición, ni siquiera una representación exacta de nuestros pensamientos más íntimos. Suelen ser mucho más simbólicos de lo que pensamos, como la psicología lleva años intentando demostrar, pero, además, dependen de otros mil factores, como el estado de ánimo, la dieta o las cervecitas que nos hayamos tomado antes de dormir.

No todo el mundo lo reconoce, pero la aparición de personas conocidas en el paisaje onírico es de lo más habitual. Lo mejor es intentar descifrar el sueño para conocernos un poquito mejor y desarrollar nuestras relaciones con otros, pero, por ahora, en Yasss vamos a intentar desentrañar tu rallada, que es lo que corre más prisa.

Antes de nada: tener un sueño erótico con otra persona no tiene por qué significar nada, de verdad. Los neurólogos y psicólogos están hartos de recordar que, durante la fase REM, el cerebro intercambia señales que pueden provocar excitación y, en ocasiones, erecciones. Ahora, ¿por qué enfocamos ese deseo en determinadas personas? No hay consenso, pero la experta del sueño y columnista Lauri Loewenberg trató de dar respuesta a esto en su libro ‘Desbloquea tus sueños para cambiar tu vida’.

¿Has soñado con un familiar? Freud tendría algo muy interesante que decir, pero Loewenberg apuesta porque se trata de la forma en que tu inconsciente bien trata de resolver un conflicto con esa persona, bien representa así el poder que tiene sobre ti. Puede que solo quieras que alguien tome las riendas de tu vida. Si el prota era un jefe, su teoría también sigue esa línea: quizás tu cabecita te está animando a tomar decisiones, a asumir un rol más autoritario. O tal vez, dándole las riendas de tu placer a una persona autoritaria, te liberes de responsabilidad y puedas dejarte llevar.

¿El prota de tu sueño era tu ex? Seguro que te trae de cabeza durante semanas, pensando si deberías volver a llamarle, devolverle esa camiseta que te quedaste sin decir nada o tener un detalle bonito por su cumpleaños. Pues mira, depende de las circunstancias. El pasado siempre vuelve y puede jugarnos malas pasadas: a veces, solo nos recreamos en relaciones anteriores para sentirnos más jóvenes, según apunta Loewenberg. Ahora, si la cosa se repite… habrá que hacer un ejercicio un poco más profundo y pensar qué significa esa persona para nosotros hoy en día.

Si tienes pareja y has soñado que te acostabas con otra persona, quizás te sientas culpable y los remordimientos te lleven a contárselo, como si tu inconsciente le hubiese engañado. Decírselo o no depende de ti y de vuestra relación, pero, según la autora, esa infidelidad onírica no tiene por qué significar el final del deseo o el anhelo de acostarte con otra persona: puede que ser la forma en la que tu inconsciente te avisa de que estás pasando más tiempo haciendo sudokus que con tu pareja y te sientes un poco culpable.

¿Sueñas con alguien que no te atrae? La autora apunta a que quizás esa persona tenga características que te gustaría “incorporar a tu propia personalidad”. Vaya, que quizás haya más admiración que atracción sexual. O puede que esa persona esté interesada en ti, tú lo sepas y tu imaginación esté haciendo su parte. Si sueñas con un desconocido, Loewenberg asume que se trata de “la personificación de las cualidades que tendemos a asociar” con el género en el que estamos interesados.

Vaya, que todo depende de tu respuesta y de tus circunstancias: tratar de descifrar tus sueños es un juego en el que tendrás que hacerte muchas preguntas y pasar malos ratos. Ante todo, recuerda que los sueños suelen ser una especie de ‘cocktail’ de lo que hemos sentido y hecho ese día: si hemos pasado todo el día con un colega y nuestro cerebro decide excitarnos, quizás nos encontremos soñando una sorpresa que nunca nos habíamos planteado y que, sin embargo, puede ser totalmente coyuntural.