A la hora de trabajar en un puesto "de cara al público" la paciencia es un requisito fundamental e indispensable para poder desempeñar las tareas ya que, los clientes pueden generar hartazgo e incluso ansiedad. Esto es lo que ha querido demostrar una joven en TikTok llamada '@ColinColan' quien se hizo viral tras relatar que recibió una amenaza de muerte mientras trabajaba en el parque Tibidabo de Barcelona.
En el relato la creadora de contenido cuenta que llevaba solo 3 días trabajando en el famoso parque de atracciones catalán y durante el verano, le tocó cubrir el turno de las tardes/noches como la única taquillera que vendía entradas, por ende "todo el mundo acudía a ella" para comprar.
Fue durante una tarde que una familia entera, compuesta pro primos, tíos, abuelos, nietos, etc fue a comprar entradas a la joven a las 8 de la noche y pese a que esta les explicó que el parque cerraba a las 9, le insistieron igualmente para comprar unas.
“Son las 9, lo típico que llega la megafonía y dice, en 5 minutos cerramos el parque. Pues al rato sube toda la familia en disposición hacia mi taquilla”, explicó la joven quien recordó que empezaron a insultarla. “Empiezan a picar al cristal, ‘¿Pero tú de qué vas hija de la gran puta? No sé qué que tú, yo te voy a matar que no sé qué’”, relató.
De repente la familia entera comenzó a insultarla y a amenazarla. “Daba miedo la situación, porque además no eran 4 o 5 personas, no, no, no no, o sea, es que eran como 15, o sea era una familia. Te prometo que todo el mundo que estaba en la familia había ido ese día al parque y entonces era una situación muy fuerte. Encima los más peques se intentaban subir para picar e insultarme también”, describió.
Tras el revuelo, la tiktoker llamo a uno de los encargados que se acercó para mediar en la situación y pese a que la familia mintió y explicó que la joven no había sido clara con lo de los horarios y el cierre del parque, el coordinador se puso del lado de la trabajadora y pidió a la familia que se retirasen. Fue allí cuando comenzaron a amenazarle que le darían una paliza cuando terminara su turno, algo que asustó mucho a la joven, pero al finalizar vio que no quedaba nadie y pudo volver a su casa. Sin duda una historia de terror.