Parece que el único que ha salido más fuerte tras la pandemia de coronavirus ha sido el botellón. Desde que se relajaron las medidas y desapareció el toque de queda, son muchos los que se dan cita para beber y salir de fiesta en las calles. A pesar de que los locales de ocio nocturno ya han vuelto a abrir y la vida va volviendo a como era antes de que este virus nos encerrase en casa, el botellón continua, y cada vez preocupa más a las autoridades. El comisario principal de la Policía Municipal de Madrid, José Luis Morcillo, ha explicado en una entrevista que se avisará a padres de menores que el cuerpo encuentre haciendo botellón.
Según ha contado el comisario en una entrevista a Telemadrid, en la que se trataba el problema del botellón en la capital española, sobre todo durante el puente del Pilar, la Policía está trabajando en ello con gran esfuerzo. Los Agentes Tutores están detectando un amplio número de menores de edad participando de estas concentraciones ilegales.
"Si encontramos a un menor en coma etílico, al padre vamos a llamarle para pedirle explicaciones. Lo pondremos en conocimiento de Fiscalía o del juez, que podría condenarle por un delito de abandono. Puede acarrear una multa o el escenario peor, en el que podrían perder la patria potestad o la tutela del niño porque la seguridad del menor puede quedar vulnerada", explicó José Luis Morcillo.
Por el puente del Pilar se esperaba en Madrid un gran número de botellones. El sábado tuvo lugar un botellón multitudinario en el Parque del Oeste de la capital, que acabó con 60 detenidos. También la Policía tuvo que movilizar un dispositivo para proteger el barrio madrileño del Pilar en un despliegue sin precedentes para evitar concentraciones de gente bebiendo en la calle.
Una joven de 17 años contó para El País que "se lió mucho en el parque Berlín la semana pasada, y esta no han parado de poner en las redes que había que venir aquí [al barrio del Pilar] este fin de semana, en TikTok, en Instagram... en todas partes. Así que claro, estaban preparados".
A nivel estatal, la ley califica como "infracción leve" el consumo de alcohol en la calle. Son las comunidades autónomas y los municipios los que tienen que regular el botellón. En España, está prohibido beber en la calle en Aragón, Canarias, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Comunidad de Madrid y La Rioja.
Sin embargo, en la desescalada del 2021 los botellones han aparecido en muchas ciudades españolas, ya desde la primera noche sin toque de queda. Enrique López y Enrique Ruiz, consejeros de Justicia y Sanidad de la Comunidad de Madrid, anunciaron el pasado mes de mayo que aplicarían un plan 'anti-botellón' para evitar las aglomeraciones de gente bebiendo alcohol en la calle. A día de hoy queda claro que no ha funcionado.
El caso de los menores de edad en los botellones es diferente, puesto que estos no solo se enfrentarían a esa infracción leve por beber en la calle. En España está prohibida la venta o suministro de bebidas alcohólicas a menores de 18 años, tras la aplicación de la Ley 4/1997, de 9 de julio, de Prevención y Asistencia en Materia de Drogas. Según apunta el comisario José Luis Morcillo, solo durante el puente del Pilar en Madrid se detectaron 8 menores de edad con intoxicación etílica.
Aparte del riesgo para la salud que entraña una intoxicación por alto consumo de alcohol, desde la Policía recuerdan que el deber de los padres o tutor legal es proteger al menor de edad, por lo que los padres o tutores también podrían enfrentarse a las consecuencias legales si sus hijos menores acuden a un botellón.