¿Alguna vez has pensado qué debió pasar por la cabeza de los romanos cuando cayó su imperio, de los franceses cuando plantaron la primera guillotina en una plaza o de los alemanes cuando empezó la II Guerra Mundial? Aún no sabemos a dónde nos llevarán los acontecimientos que estamos viviendo, pero, sin duda alguna, 2020 será un año que pasará a la Historia. Mientras en Estados Unidos se descontrolan las revueltas contra el racismo y el presidente Donald Trump amenaza con desplegar al Ejército, en España la tensión política a veces se vuelve insoportable. Algunos ciudadanos reaccionan, otros miran atónitos a los cambios tan rápidos que parece que se suceden sin parar.
No estamos acostumbrados a ver a los famosos más famosos posicionarse en público, pero, como ha dicho Cepeda en ese mensaje que ha enviado esta misma mañana todo tiene un límite. Aunque su reflexión fue compartida en un grupo de Telegram en el que envía mensajes de todo tipo a sus fans, estos difundieron a través de otras redes sociales, y "Cepeda" ha llegado a convertirse en tendencia, es decir, uno de los temas del día, en Twitter.
"Ya no sé cómo actuar en redes cuando veo a la ultraderecha escribir lo que escribe", confiesa. "Culpando a la izquierda de la separación de los españoles, culpando al Gobierno de la pérdida de empresas y no a una pandemia global". Se refiere el cantante a un carta firmada por el grupo parlamentario de VOX pidiendo a Nissan que no abandone España, comprometiéndose a "generar un entorno menos hostil a la industria en general".
Continúa así Cepeda: "Me da vergüenza que haya gente por la calle que vote a un tío que es capaz de decir las barbaridades que dice. Soy APOLÍTICO y me parecen todos unos impresentables, pero hay límites en los que la ética interviene y te decantas por los que, al menos, defienden los derechos humanos. Hay que ser c*brón para aprovechar lo que está pasando con fines políticos y echar la culpa al Gobierno de todos los cierres de empresas".
El cantante ha decidido que ya no quiere callarse. Es cierto que para estos artistas tan generalistas y con tantos miles de fans, tomar posición en conflictos no suele ser recomendable. Aunque otros muchos lo han hecho, como C. Tangana y Miki, que opinaron públicamente sobre el conflicto con Cataluña, otros prefieren no hablar nunca de temas tan delicados.
"Me gustaría quedarme callado viendo cómo el mundo sigue igual que en el siglo XVIII, pero no puedo", concluye Cepeda. "No han evolucionado. Tienen la misma mentalidad que un esclavista de ese siglo pero con las restricciones morales para no ser linchados en el siglo donde vivimos. Pero la mentalidad, la tienen. Y yo no respeto a la gente que no respeta los derechos humanos. Lo siento, pero no puedo".
Su gran amigo Roi también ha condenado el mensaje de VOX en el que mostraba su apoyo a Trump y ha tuiteado en favor de la lucha antirracista.
Otra de las artistas españolas que no nos tiene muy acostumbrados a speeches políticos es Rosalía, quien también ha querido tomar partido pidiendo que "no permitamos ni callemos injusticias". Parece que cada vez es más difícil mantenerse al margen.