Con la pandemia del coronavirus muchas actividades han tenido que pausarse para intentar frenar la propagación del virus; sin embargo, afortunadamente, algunas de estas actividades están volviendo a llevarse a cabo con relativa normalidad como, por ejemplo, los rodajes tanto de películas como de series o programas de televisión.

Cuando se graban películas, el despliegue de medios que se lleva a cabo es espectacular y no pasa en absoluto desapercibido para los vecinos de la zona donde se lleva a cabo el rodaje; desde los actores hasta los técnicos, cada uno hace su trabajo repartidos por algún lugar de la zona de la grabación. Pues bien, este domingo 25 de abril en Alginet, un municipio de la Comunidad Valenciana, se estuvieron grabando algunas escenas de una serie de crímenes.

Para que este pudiera llevarse a cabo, los responsables del rodaje se pusieron en contacto con el alcalde del pueblo, José Vicente Alemany, que les concedió los permisos necesarios. Sin embargo, el alcalde no avisó a los vecinos, que, por tanto, no se habían enterado de esta grabación y se llevaron el susto más grande de su vida cuando vieron la plaza del pueblo llena de "atracadores encapuchados y armados con metralletas".

La caracterización era tan buena y este año hemos vivido situaciones tan surrealistas que los vecinos en ningún momento pensaron que pudiese ser ciencia ficción.

Los vecinos del pueblo, confundidos por lo que estaban viendo en la plaza principal: atracadores encapuchados armados con metralletas entrando al consistorio; llamaron a la Guardia Civil, que acudió al Ayuntamiento de Alginet.

Parecía tan grave lo que les estaban contando los vecinos que no fue una única patrulla la que se acercó al Ayuntamiento, sino cinco, tal y como se puede ver en los vídeos que han difundido en sus redes sociales los que estaban presentes en aquel momento.

Los vecinos de la zona estuvieron muy pendientes de lo que estaba ocurriendo, pero finalmente todo quedó en un susto, ya que se trataba de un rodaje del que el alcalde no había avisado ni a los vecinos ni a la Policía.

Tras lo ocurrido, según informan medios locales, el alcalde de Alginet ha reconocido su error al no informar de esta grabación ni a los vecinos ni a la Policía y, además, desde el Ayuntamiento han explicado que no tenían constancia de que fuera a haber réplicas de metralletas.

La Guardia Civil no dudó en ningún momento de que esta escena fuese real y fue por eso que se colocaron detrás de sus coches para apuntar a la entrada del consistorio e intentar de esta manera que salieran rápidamente los atracadores de allí. Menos mal que, aunque fue tarde, se enteraron de que los atracadores eran en realidad actores de la serie Powerboys, de Aitor Espert, producida por Spectro Films, un proyecto que se prevé que vea la luz dentro de más o menos un año, es decir, a lo largo de 2022.