Chanel ha logrado este sábado un histórico tercer puesto en el festival de Eurovisión 2022 gracias a su imponente actuación de "SloMo". La candidata española ha sido la tercera mejor valorada por el jurado y también la tercera más votada por el público. En total, 459 puntos que dejan a nuestro país en su mejor puesto desde la plata de Anabel Conde en 1995 y récord de puntuación en nuestras más de 50 participaciones.
España ha sumado en total ocho "12" del jurado profesional y uno sólo, el de Grecia, en un televoto dominado claramente por la ganadora Ucrania. En el voto del público, todos los países dieron al menos un punto para España salvo Italia. El jurado italiano también fue de los pocos que dejaron sin premiar la excelente propuesta española.
Un vídeo filtrado a redes sociales de la retransmisión para la RAI del festival podría explicar la ausencia de puntos para Chanel tanto en el jurado como en el televoto italiano. En dicha grabación, el comentarista Cristiano Malgioglio tilda a Chanel durante el recap de actuaciones como una "Jennifer López de saldo". Y añadió en otro momento: "La canción está bien para la playa el verano. ¡Pero Jennifer López sólo hay una!"
Una apreciación indigna y que rompe el carácter neutral que los comentaristas de Eurovisión deben mantener durante la retransmisión. Algunos espectadores italianos han dicho que el polémico narrador ha descalificado a Chanel al menos tres veces durante la final del concurso.
Otros espectadores italianos han intentado defender al profesional asegurando que Malgioglio ha hablado mal de varias candidaturas y que es su forma "graciosa" de comentar el concurso.
El 'chanelazo' fue real. España triunfó con la mejor actuación de su historia. Chanel barrió con la fuerza huracanada de una reina, con una coreografía imponente y un show de tres minutos que pocas veces se ha visto sobre el escenario de este festival. España no parecía España. Las puestas en escena mediocres, la mala realización, la ineficiente iluminación y las canciones insulsas que se han adueñado de nuestra andadura en los últimos años quedaron totalmente olvidadas por la apuesta más grande y solvente que España nunca se ha atrevido a llevar. Y eso, ya de por sí, fue todo una victoria para Chanel.
El Pala Alpitour se vino abajo, con una de las mayores ovaciones que se recuerdan en Eurovisión. Chanel y sus bailarines, visiblemente emocionados, no supieron digerir el exceso de cariño que el público eurofán les brindó como premio por su imponente actuación.