Sabemos que Élite es una de tus debilidades en el catálogo de Netflix; esa joyita llena de traiciones, asesinatos y gente guapa (que no se presenta a la Selectividad).

Es normal. Casi todo lo que rodea a los fichajes de la serie y los actores y actrices que han dado vida a sus intensos personajes es noticia, especialmente aquellas relacionadas con asuntos del corazón. La vida ‘real’ de los actores también trae toneladas de salseo y rumorología, al igual que la serie, que ya cuenta con bastante carnaza en sus tramas. Con la cuarta temporada a puntito de caramelo, sus espectadores viven a fuego cada giro, traición y polvo clandestino o cuchillo enterrado en Las Encinas. Sexo, asesinatos y unos diálogos shakesperianos (concretamente, como si Shakespeare escribiera con una resaca descomunal)

Al personaje de Cayetana (vaya, podrían habérselo currado con el nombrecito), la reina del meñique levantado, esta camaleona entre pijas de cuna humilde y con cara de “hazme un masaje tailandés, esclavo”, la hemos visto moverse por el colegio como pez en el agua. La actriz que da vida a este personaje, Georgina Amorós, tiene una vida profesional y sentimental . Pronto la veremos en la nueva película de Woody Allen. En lo que respecta a asuntos del corazón, Georgina lleva tiempo dejándose ver en público y redes sociales con su pareja, Diego Betancor, un desconocido de los fans de la serie. ¿Quién es ese tipo que ha conquistado el corazón de la actriz?

Te lo contamos.

Es normal que Diego Betancour haya pasado desapercibido para los fanáticos de la serie y sus tramas llenas de giros. Su labor es discreta, entre bambalinas. Es uno de los productores ejecutivos de la ficción de Netflix; el clásico tipo apagafuegos que consigue llevar a término los rodajes y la planificación de este bombazo televisivo, junto con el resto del equipo. Anteriormente, Diego ha sido director de casting de distintas producciones, como ‘Tiempo después’ (José Luis Garci) o ‘Aliados’ (Robert Zemeckis)

Por lo que cuentan las buenas lenguas, este emoji del fueguito entre él y la actriz ya lleva tiempo sin apagarse. Llevan ya más de un año saliendo, coincidiendo justo con el inicio de la pandemia de la Covid. Las pistas nos las han ido dando las redes sociales de ambos, sobre todo las de Georgina, que no ha tenido reparos en ir mostrando las instantáneas con su chico a lo largo de los meses.

Los propios fans de la actriz se dieron cuenta de que el amor se estaba cociendo al inicio de la pandemia, cuando los empezaron a subir fotos juntos. Hubo tantas que, al final, el asunto cantó lo bastante como para sacar una conclusión. La actriz y el productor estaban pasando la cuarentena juntos. ¡Viva el amor! Quizá esa ‘rutina’ a la que se refería Diego en una entrevista para Sensacine fuera Georgina, cuando le preguntaron cómo había vivido la pandemia: “Trabajando, dentro de lo que cabe mantengo una rutina que me ayuda a mantenerme activo.

A partir de ahí, los rumores han seguido creciendo, en contraste con la relación, pues parece que va viento en popa y que las labores de productor de Diego no impiden una vida amorosa llena de planes juntos. Lo mismo se hacen una foto juntos en la bañera que salen abrazados en la playa, o con Diego besando las mejillas de Georgina.

También hay fotos traicioneras, como esa de Diego abrazado a un cojín y con un pijama que parece haber sobrevivido a tres inviernos nucleares. Bromas aparte, Diego ha hablado siempre con mucho cariño de su chica en las distintas entrevistas.

Como todos los amores y sus etapas, la pasión crece a medida que lo hacen los planes. Se sabe que han viajado bastante juntos por Hawai y Estados Unidos.

Es posible ver a los dos posando en los mismos lugares, cogidos de la mano, con los ojos rebozados y empanados de pasión. Georgina se ha colado en las declaraciones de Diego en las distintas entrevistas sobre la serie. “Ella es mi diva, siempre lo digo”. Sonríe él, y sonreímos nosotr_s.

Ojalá que este amor dure muchísimo.