Rigoberta Bandini, con su canción 'Ay mamá', pasa a la final del Benidorm Fest con la mayor puntuación tanto por parte del jurado profesional como del público español. Eso sí, que haya sido favorita en su semifinal no quiere decir que vaya a ganar el sábado, pero hay que reconocer que tiene muchas posibilidades. Su candidatura ya ha sido calificada como un himno y son muchos los fans que la apoyan. ¡A ella y a su canto a las tetas! Y es que causó mucho furor el vídeo de un concierto de Rigoberta Bandini en el que, cantando 'Ay mamá', tanto ella como su corista se sacan el pecho.

La cantante catalana y su banda (que en la propuesta para Eurovisión no tocan instrumentos ni cantan, solo la acompañan en el escenario) se suman así a Rayden, Xeinn, Gonzalo Hermida, Chanel, Tanxugueiras, Blanca Paloma y Varry Brava. Los ocho participantes repetirán su actuación el próximo sábado 29 de enero, y será entonces cuando conoceremos quién representará a España en Eurovisión 2022.

El gran secreto de las semifinales era el de la puesta en escena y la realización de cada participante. Algunos han arriesgado más que otros y eso se ha notado en las votaciones. Y precisamente ese ha sido el punto fuerte de 'Ay mamá'.

La candidatura ya estaba arrasando como canción, llegando a colarse en el TOP 20 de Spotify España, pero la puesta en escena en directo ha gustado, ¡y mucho! Tanto como para otorgar a la catalana 111 puntos totales, convirtiéndola en la más votada de las dos semifinales.

Al comenzar la canción, Rigoberta aparece vestida en el escenario con un vestido blanco que cubre todo su cuerpo, un velo y unas gafas de sol. Aunque muchos lo pasaran desapercibido, el vestido tenía un guiño a la portada de su single.

En la zona del vientre de la cantante puede verse la figura de La Emperatiz de las cartas del tarot, imagen elegida también para la portada del single. "La emperatriz representa a la fuerza femenina activa y dominante, que actúa directamente para realizar sus fines", es definida en Wikipedia. Además, en una de las mangas, también lleva troquelado el nombre de su hijo Nico.

Claramente, su canción es un himno a las mujeres, a la feminidad, y también un himno feminista. Prueba de ello es el detalle que no ha pasado desapercibido en redes sociales de que los dos hombres que participan en 'Ay mamá' también lleven sujetadores para que no se vean sus pechos.

Si la propia Rigoberta Bandini no puede enseñar sus pechos en directo, el resto del equipo tampoco lo hará. Aunque a los hombres sí se les permita, como quedó demostrado el año pasado con la actuación de los ganadores, Måneskin, cuyo cantante Damiano David, cantó su canción con el pecho tan solo cubierto con unos estrechos tirantes, para luego acudir a la rueda de prensa con el torso totalmente desnudo. Ante esta discriminación sexista, la banda de Rigoberta decidió cubrir los pechos de todos los participantes con el mismo sujetador blanco.

Pero sí que se vieron tetas sobre el escenario del Benidorm Fest durante la actuación de Rigoberta Bandini. Estas fueron proyectadas en las diferentes pantallas del escenario.

Y, tal y como había prometido, una teta gigante ocupó el escenario. Esa bola del mundo sustituida por una teta lanza un mensaje tan claro como la letra de su canción: sin tetas no habría humanidad. Además, a medida que pasa la canción, la cantante va desnudándose poco a poco hasta quedarse en ropa interior sobre el escenario, con un body color nude que recuerda a las fajas que han oprimido los cuerpos de tantas generaciones de mujeres.

Otro detalle a tener en cuenta de su puesta en escena y coreografía es la fuerte presencia del círculo como símbolo. La propia Paula, nombre real de Rigoberta Bandini, lo explicó así en la rueda de prensa: "El círculo es la fuerza para renacer, ayudarnos entre nosotras y quitarse la piel, literalmente, para renacer y liberarnos".